UAH-Viváfrica: Una maratón para dejar huella

Ciento sesenta personas de 15 países han viajado este viernes hacia los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf, en el agreste y agresivo desierto del Sahara en Argelia, para participar en el XII Sahara Maratón, una carrera de 42,145 kilómetros entre los campamentos de El Aaiún y Smara que se celebrará el próximo 27 de febrero y que se combinará con medias maratones de 10 y 5 kilómetros.

Se trata de una de las maratones más extremas del mundo. Se desarrolla en un medio hostil, al que se suma la falta de seguridad. No en vano, la edición de este año está especialmente dedicada a los tres cooperantes secuestrados en Rabuni el pasado octubre: Ainhoa Fernández de la Asociación de amigos del Pueblo Saharaui de Extremadura, Enrique Gonyalons de Mundubat y la italiana Rosella Urru.

Lo importante de esta prueba deportiva es que se consigue recaudar en torno a 80.000 euros que dan de sí como para crear zonas deportivas, planes de estudios, aportaciones mensuales de material deportivo... Y también hay quienes se animan y personalmente apoyan operaciones oftalmológicas (el sol abrasa y la sequedad es extrema), educación básica para menores ciegos, o programas para iniciar a las mujeres en el deporte. Se trata de dejar una huella en el desierto, dicen los organizadores,y no solo las que dejen los atletas participantes en su recorrido.

En esta XII edición, además, tres cocineros integrados en un grupo llamado Running Chefs, intentarán cubrir una media marathón y recaudar 5.000 euros para dar desayuno a los niños en las escuelas. Y por supuesto, sirve para recordar que desde hace 36 años se clama por que se reconozca la independencia de un territorio que España cedió a Marruecos sin concluir el proceso de descolonización. Ya son cerca de 70 las resoluciones de las Naciones Unidas a favor de un referéndum que nunca llega porque todas las alternativas que se ofrecen son favorables a Marruecos. Con apoyo de Francia.

Quizás debería haber empezado por decirles que hay al menos una generación entera que ha nacido en esas jaimas y casas de adobe que son los campamentos de Tinduf. Han hecho en ese trozo argelino una replica exacta de lo que son las provincias en el Sahara ocupado. De ahí que haya una wilaya (provincia) llamada Smara y otra Aaiún, que a su vez de dividen en dairas, o municipios.